Entre las muchas devociones que nos ha dejado la Iglesia, hay una especialmente hermosa y llena de promesas: la devoción a los Primeros Viernes de mes, un regalo del Sagrado Corazón de Jesús para todos aquellos que deseen vivir en su amor y confiar en su misericordia.
En un mundo donde la fe en el hogar se debilita y las familias enfrentan tantas distracciones, recuperar esta tradición es una manera sencilla y poderosa de fortalecer la vida espiritual familiar y enseñar a los niños el valor de la reparación y la fidelidad a Cristo.
Si nunca has practicado esta devoción, aquí te contaré qué son los Primeros Viernes, por qué son importantes y cómo vivirlos en familia.
1. ¿Qué son los Primeros Viernes de mes?
La devoción a los Primeros Viernes de mes tiene su origen en las revelaciones del Sagrado Corazón de Jesús a Santa Margarita María de Alacoque en el siglo XVII. En una de sus apariciones, Jesús le pidió que las almas se acercaran a Él con amor y reparación, y prometió gracias especiales a quienes recibieran la Sagrada Comunión en los primeros viernes de nueve meses consecutivos.
📜 Promesa de Jesús a quienes cumplan esta devoción:
“A las almas que practiquen la devoción de los Nueve Primeros Viernes consecutivos, les concederé la gracia de la perseverancia final. No morirán en desgracia ni sin recibir los Sacramentos. Mi Corazón será su refugio seguro en ese último momento.”
En otras palabras, quien viva esta devoción con amor y fidelidad recibirá la gracia de la salvación eterna.
2. Cómo vivir los Primeros Viernes en familia
Esta devoción no es solo para personas individuales, sino una oportunidad perfecta para fortalecer la fe en la familia y acercar a todos al Sagrado Corazón de Jesús.
Pasos para vivir los Primeros Viernes en familia:
1️⃣ Asistir a Misa y recibir la Sagrada Comunión
- Es el acto central de la devoción. Jesús pidió que se recibiera la Eucaristía en estado de gracia como reparación por los pecados del mundo.
- Si algún miembro de la familia aún no ha hecho su Primera Comunión, puede participar en la Misa y hacer una comunión espiritual.
2️⃣ Confesarse (preferiblemente antes o el mismo viernes)
- Para recibir la Comunión dignamente, se recomienda la confesión sacramental.
- No es obligatorio confesar cada Primer Viernes, pero sí es esencial estar en gracia de Dios.
3️⃣ Ofrecer el día como acto de reparación
- Jesús pidió esta devoción para consolar su Corazón, herido por la indiferencia y el pecado.
- La familia puede ofrecer pequeños sacrificios o actos de amor a lo largo del día: ser más pacientes, ayudar a alguien, rezar por los que no creen.
4️⃣ Rezar juntos en familia
- Se puede rezar la Oración de Consagración al Sagrado Corazón o la Coronilla del Sagrado Corazón.
- Leer un pasaje del Evangelio relacionado con el amor de Cristo.
- Hacer una oración espontánea agradeciendo a Jesús su amor infinito.
5️⃣ Colocar una imagen del Sagrado Corazón en casa
- Tener una imagen entronizada ayuda a recordar la presencia de Jesús en el hogar.
- Se puede adornar con flores y encender una vela especial los Primeros Viernes.
3. Adaptar la devoción para los niños
Si tienes niños pequeños, puedes hacer que esta devoción sea más significativa para ellos con actividades adaptadas a su edad. Algunas ideas:
Para los más pequeños:
- Explicarles con cuentos o dibujos quién es el Sagrado Corazón de Jesús y por qué le amamos.
- Hacer una pequeña oración juntos, diciendo: “Jesús, te amamos y queremos consolar tu Corazón.”
Para niños más grandes:
- Llevarlos a la Misa del Primer Viernes y explicarles que es una oportunidad para hacerle compañía a Jesús.
- Invitarles a escribir en un papelito una “ofrenda de amor” (por ejemplo, ayudar a un hermano, compartir algo con alegría, no quejarse por un día).
4. ¿Qué pasa si me salto un Primer Viernes?
Para cumplir con la promesa del Sagrado Corazón, la devoción debe realizarse durante nueve Primeros Viernes consecutivos, sin interrupción.
Si por alguna razón un mes no se puede asistir a Misa y recibir la Comunión, es recomendable comenzar de nuevo la serie de los nueve meses. La gracia de esta devoción es un regalo tan grande que vale la pena hacerlo con fidelidad.
Sin embargo, si se tiene la costumbre de vivir los Primeros Viernes como un hábito familiar, más allá de la promesa de los nueve meses, las bendiciones para el hogar serán continuas.
5. Otras promesas del Sagrado Corazón
Además de la gracia de la perseverancia final, Jesús hizo 12 promesas a quienes se consagren a su Sagrado Corazón. Algunas de las más hermosas para la familia son:
“Bendeciré las casas en que la imagen de mi Sagrado Corazón sea expuesta y honrada.”
“Daré a las familias la paz.”
“Seré su refugio seguro en la vida y en la muerte.”
Estas promesas nos recuerdan que cuando vivimos en unión con el Sagrado Corazón, nuestra familia está cubierta por su amor y misericordia.
Los Primeros Viernes de mes no son solo una devoción más, sino una oportunidad de acercarnos a Jesús y enseñarle a nuestros hijos el amor por su Sagrado Corazón. En un mundo que muchas veces lo ignora o rechaza, esta práctica es un faro de luz y esperanza para la familia.
Si aún no has comenzado esta devoción, haz la prueba durante nueve meses y verás cómo transforma tu hogar y tu vida espiritual.
📿 ¿Tienes la costumbre de vivir los Primeros Viernes en familia? ¿Te gustaría comenzar? Déjamelo en comentarios y comparte este post para que más familias descubran esta hermosa devoción.
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